Crea un poeta,
en desolados viajes,
voces ausentes.
La intemperie
nos abraza en silencio.
Aflora un haiku.
Un caminante,
marcha con soles propios
y su alma escriba.
Porta el arroyo
sensible poesía
en su devenir.
Contemplo el fuego
y crepita el pasado.
Cierro los ojos.
Danza de alas,
mariposa alocada.
Acaso, ¿me hablas?
Omar Lagraña