Crecida de río
como alma en pena,
nace llorando.
¿Miras los carros
sin ver el otro sufrir
que incomoda?
Cada tanto el sol
se muere lentamente
¿nos damos cuenta?
Nuestro audaz río
navega por nosotros
hacia el ocaso.
Inermes yacen
las hamacas del Parque
bajo el agua cruel…
Siento una brisa.
Viene del río estero
y me abrazo.
Gervasio Magno
